Revólver – Odio

Seguimos una semana más escribiendo el que espero que sea un largo libro sobre Joyas musicales, un libro que abarca grandes canciones con buenas letras y buena música, o con buena interpretación, o sólo con buena música, o sólo con buena letra, pero, en cualquier caso, grandes canciones. La de hoy es, para mi gusto, una canción que merecería un diez en su nota. Hablo de la canción Odio, de Revólver.

Estamos ante una canción que expresa de un modo muy especial y muy directo las opiniones que Carlos Goñi tiene acerca de diversos temas del mundo actual, ese que tantas desgracias trae a menudo a gente inocente, a gente que no tiene nada que ver con las maldades de los demás. Si no es la opinión del artista, está muy bien escrita de tal manera que cualquiera pueda sacar de ahí opiniones que son grandes verdades.

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Joya – Toca para mí

De nuevo nos vemos en nuestro blog de música de La Gran Red, de nuevo para hablar de las Joyas musicales, esas canciones que tanto significan en algún momento para nosotros, o para algunos en especial. La de hoy es una verdadera joya, una de las mejores canciones que he escuchado del artista que vamos a escuchar. Alejandro Sanz, el gran cantante que triunfó gracias al famoso tema Corazón Partío o Y, ¿si fuera ella?, el mismo cantante que compuso esta canción: Toca para mí.

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Joya – Quiero beber hasta perder el control

Aunque con retraso, llega la Joya de esta semana a nuestro blog de música. Debería haber estado aquí ayer, viernes, pero no importa: hoy es sábado, no ha pasado mucho tiempo. Además, para el título de la canción nos viene muy bien el día de hoy.

La canción de la que vamos a hablar hoy se titula Quiero beber hasta perder el control, interpretada por Fito & Fitipaldis en un concierto, totalmente en directo. Decía que nos viene muy bien el día de hoy para hablar de esta canción porque está lloviendo. En la calle está lloviendo y una tormenta hay en mi corazón. Por eso, es la mejor canción que podría asignar para esta semana.

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Joya – La canción del pirata

Bienvenidos, bienvenidas, a todos y a todas. Entramos en el apartado musical de los viernes: las Joyas. Hoy, con una canción muy especial, mezcla de literatura y música. Cuando dimos puerta abierta, hace ya tiempo, a esta sección, hablábamos de recomendar canciones que por su letra o por su música, y generalmente por las dos cosas en conjunto, merecieran realmente la pena –evidentemente, desde un punto de vista personal–. Esta canción, por su naturaleza, no podemos decir que sea recomendable porque tiene una buena letra, puesto que el letrista es, ni más ni menos, que el gran José de Espronceda. Así que no se podría decir la típica frase de “tiene una letra muy buena”, claro que la tiene, es un poema de Espronceda. Un poema romántico al que este grupo, Tierra Santa, puso música. Así, hablaremos de La Canción del Pirata como una de nuestras grandes Joyas, de las más grandes de nuestro repertorio, por el simple y mero hecho de que la letra es un gran poema de la literatura española y la música es, bajo mi punto de vista, bastante buena.

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Joya: Cannabis.

En la entrega de Joyas de esta semana vamos a hablar de esta canción, cuya letra tiene algo especial, que es la reclamación de los miembros del grupo para que legalizasen la yerba –la que se fuma–. La canción tiene el nombre de Cannabis, y pertenece al grupo de madrileños que tocaban al estilo ska, y que se llamaba Ska-p.

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Joya: Te quise olvidar.

Hace tiempo que no dedicamos el espacio que teníamos reservado para las Joyas dentro de este blog de música, en parte, porque el mes pasado, agosto, ha sido un mes demasiado ajetreado. Pero desde este post comunico que, a partir de ahora, todos los viernes, de la misma manera que estaba establecido desde hace tiempo, se dedicará este espacio para recomendar canciones cuya letra o música, o ambas en el mejor de los casos, merecen realmente la pena. Por supuesto, será una selección caprichosa, pues lo que a mí, como autor de los presentes artículos, me pueda parecer una canción ejemplar, a otro, como lector de los mismos, no se lo parezca, pero hasta ahora, en lo que llevamos de Joyas, no he visto que haya ido mal. En definitiva, espero que os guste mi propia elección, si no, seguro que en alguna Joya habré acertado. Sin más, vamos a hablar de la perteneciente a esta semana.

Esta canción se llama Te quise olvidar, y es una de las canciones a través de las cuales yo mismo, músico de vocación y pianista de ocupación académica, que no escuchaba un solo sonido, me abrí al mundo de la música. Fue un camino diferente al que llevo hoy dentro del ámbito musical, un camino distinto a la hora de escuchar de una u otra manera las canciones, pues ahora me fijo mucho más en la letra que en la música, y antes era al revés. Pero, pese a todo, esta canción siempre me pareció buena.

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Joya: Una canción para la Magdalena.

Es una de las mejores, no tengo ninguna duda acerca de esta opinión. Es una de las mejores canciones de amor que haya escrito el que la firma. Una canción de amor a una prostituta, toma, pero una tremenda canción de amor. Tanto la letra como la música son verdaderas joyas, y más cuando la voz la acompaña este piano.

Ya sé que ha aparecido varias veces Joaquín Sabina en este tema de las Joyas, pero creo que no puede pasar otra vez más con una letra del jienense. Ésta, ya os digo, es una de las mejores canciones que contiene su repertorio, y es una de las que marcan desde que un adolescente de catorce años, como era yo cuando lo descubrí, empieza a interesarse por su arte. Por eso, entre otras cosas, la considero una Joya digna de ocupar el lugar que le asigno en este tema, porque la letra hace que cualquiera que persiga la mejor canción de amor del mundo, se dé cuenta de que no necesariamente una canción de amor va dirigida a una bella mujer a la que el autor quiere mucho, o, en su defecto, a una bellísima mujer que no hace caso al autor –en ese caso es de desamor la canción, pero trata el mismo tema–. Esta canción, pues, marca en un tema tabú para algunos (el de las prostitutas) una bellísima historia de amor, por eso creo que es digna de ser escuchada atentamente.

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Joya: Desde mi cielo.

De nuevo me veo obligado moralmente a pedir disculpas por haberme retrasado en publicar la Joya de esta semana. He tenido algunos contratiempos –buenos, por cierto– que me han impedido centrarme en este hueco que hay cada Sábado en el blog de música. Hoy es domingo, así que no es gran retardo, pero aun así, disculpas. Pasamos, pues, a la Joya de esta semana.

Mägo de Oz. Sin duda, el mejor grupo de rock español bajo mi punto de vista. Sin duda, una de sus mejores canciones, una de sus mejores letras y una gran música, acompañada al principio con perfecto ritmo al piano. Desde mi cielo es una letra deliciosa sobre la muerte, melancólica, sensacional.

No se trata de un vídeo clip, sino de la canción con una foto propia del grupo de fondo. Ocurre que no he podido encontrar un vídeo que se ajustara al sonido original, que es lo que importa en estos momentos.

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Joya: Nunca el tiempo es perdido

La joya de esta semana ha llegado tarde, pero ha llegado, ya está aquí, y va a mostrar su cara oculta sin perder ya más el tiempo. Manolo García, a día de hoy, viernes –día de la joya en Gran Música–, el cantante de esta semana. Nunca el tiempo es perdido, la joya de esta semana, la canción de la metáfora. Busquen un sentido distinto en cada verso: lo encontrarán. Manolo es un experto en eso.

Nunca me gustó, nunca, pero uno se hace mayor, uno madura, uno entristece y se tiñe de canciones tristes, a no ser que regreses cada mañana –entonces, uno se tiñe de alegres canciones–. Nunca fui fan de Manolo, pero sus letras comienzan a hacer efecto en el fondo del subsuelo de mi corazón. Nunca fui partidario de su voz, pero la voz, sinceramente, a estas alturas me resbala: lo que importa es la letra. Por eso tantos que hay por ahí presumiendo de tener una gran voz –la tienen, claro que la tienen– se quedan tan cortos cuando en un escenario no saben hacer otra cosa que dejillos y bailoteos para que las titis se pongan contentas. No, lo que importa es una buena música, pero sobre todo, una buena letra. Y este es un caso de buena música y buena letra, de la mano de uno de los maestros –en la vida hubiera dicho esto, y mírenme, diciéndolo estoy y atrás no me voy a echar– de la música actual.

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Y ahora voy a salir (ranxeira)

El tema con el que el grupo Mägo de Oz ha presentado su último álbum, La ciudad de los árboles, en 2007, es una mezcla de ranchera y rock, estilo propio del grupo. El inmenso contraste que Txus introduce con su batería inimitable pone los bellos de punta a cualquier amante del rock, cuando se pasa de una ranchera mexicana a un tema rock con sus horteradas, como dicen Mohamed y Fernando, el violín y la flauta, respectivamente. Todo ello, junto con la insuperable voz de Jose, hacen de Mägo de Oz un grupo inolvidable, tanto como este tema.

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